El descenso en el área de las licencias aprobadas para 88 municipios fue de 18,5% frente a 2015. En vivienda la disminución fue de 17,8% y en otros destinos fue de 20.2%.

 

Los metros cuadrados aprobados de licencias son los mas bajos desde 2012 y constituye una reversión a un ciclo ascendente de tres años que alcanzó su tope en 2015. En vivienda de interés social la caída en 2016 fue de 13,4% y en vivienda diferente a VIS fue de 19,3%.

En destinos distintos a vivienda sobresale la disminución de 26,5% en comercio, de 31,9% en bodegas, y de 32,3% en industria. Solo los renglones de oficina y de administración pública experimentaron aumentos (8,5% y 69,6%, respectivamente).

Aunque una mayor estabilidad en la tasa de cambio y un aumento en la liquidez a partir del segundo semestre de 2017 podrían ayudar a amortiguar el ciclo descendente actual, lo cierto es que el mercado está bastante sobre ofrecido en la mayoría de los centros urbanos. El abrupto desplome de la bonanza petrolera a finales de 2014 coincidió con un punto alto de la actividad edificadora urbana, lo que dio lugar a un desequilibrio entre oferta y demanda que podría extenderse a este y el próximo año.